Sobre diarios y formas de contar la vida, ideas disparatadas que terminan frustrándose, libros que se han disfrutado —o no—, joyas y frutos y metáforas.
Muchas gracias, Elena, por esa preciosa mención. Recibí tu carta estando de viaje (todavía lo estoy) y me dio tremenda alegría. Creo que para momentos así ya valió la pena todo el proceso de escritura. Buen año también para ti. Un abrazo grande desde Oaxaca!
¡Muchas gracias a ti, Ana! El libro es estupendo, de las lecturas más gratas del año pasado... Lo disfruté y aprendí, ¡no sabes qué cantidad de subrayados! Te envío por correo una fotografía que quizá te haga gracia... Buen año, genial viaje, ¡y un abrazo!
Tus palabras tienen algo especial que no sabría definir. Al leerlas no solo te leo, sino que me leo. Al conocerte, me reconozco. Gracias por compartir sentires y pensamientos.
Muy bueno, me ha encantado tu lucha contra el diario de gratitud. Gracias por compartirla. En cuanto a los sueños, de mediocres nada. Todos me han parecido muy simbólicos. El del anillo y el olvido es maravilloso. Recuerdo en el pasado tener también esta idea de que mis sueños eran banales. Pero ahora los atesoro tanto como mis canciones.
Yo aparte de todas estas cosas, también he tenido un diario de envidias, y uno de alegrías. El de alegrías me resultó muy útil, porque me di cuenta de cuantas cosas me dan alegría que antes de hacerlas me resisto a hacer jajaja.
¡Muchas gracias a ti, Dani! Quizá «mediocres» no era el adjetivo adecuado —o quizá sí—, sino «aburridos», «grises». Muchas veces leo sueños de otras personas y me fascinan por la complejidad, el simbolismo... También pienso que se los inventan, eso sí. ¡Y me ha encantado lo del diario de envidias!
Hola Elena! Si tuviera que escribir en un diario de gratitud, no me olvidaría de agradecer el hecho de haberme suscrito a tu correo
Es un placer leerte y tus reflexiones resuenan fuerte en mí. Me siento muy identificada. Que tengas un hermoso comienzo de año y desde Argentina, agradezco tus palabras y las espero con mucha ilusión! Gracias!
Gracias Elena por este correo bellísimo para terminar el año. La idea del diario de gratitud me parece fantástica, aunque me temo que me pasaría lo mismo que a ti, y con el tiempo me quedaría sin tiempo para continuar agradeciendo. A mí me apasiona la idea del diario como aquello donde no está escrito lo que en realidad querías escribir, donde se puede leer lo que no has escrito. Un abrazo y feliz año, gracias por tus correos, que siempre me dan luz
¡Muchas gracias a ti, Begoña! Qué maravilla esa idea del diario posible dentro del diario que es... Justo ando releyendo el de Chacel y al principio, en los años cincuenta, plantea algo parecido (o no, pero a mí me lo ha recordado). ¡Un abrazo!
Muchas gracias, Elena, por esa preciosa mención. Recibí tu carta estando de viaje (todavía lo estoy) y me dio tremenda alegría. Creo que para momentos así ya valió la pena todo el proceso de escritura. Buen año también para ti. Un abrazo grande desde Oaxaca!
¡Muchas gracias a ti, Ana! El libro es estupendo, de las lecturas más gratas del año pasado... Lo disfruté y aprendí, ¡no sabes qué cantidad de subrayados! Te envío por correo una fotografía que quizá te haga gracia... Buen año, genial viaje, ¡y un abrazo!
Qué maravilla
¡Muchas gracias! (y abre ya tu Substaaaaaack). ❤️🔥
Maravilloso, amiga. Feliz año <3
¡Muchas gracias! ¡Feliz año, todavía hoy, todo el rato!
Tus palabras tienen algo especial que no sabría definir. Al leerlas no solo te leo, sino que me leo. Al conocerte, me reconozco. Gracias por compartir sentires y pensamientos.
¡Muchas gracias a ti, José David!
Muy bueno, me ha encantado tu lucha contra el diario de gratitud. Gracias por compartirla. En cuanto a los sueños, de mediocres nada. Todos me han parecido muy simbólicos. El del anillo y el olvido es maravilloso. Recuerdo en el pasado tener también esta idea de que mis sueños eran banales. Pero ahora los atesoro tanto como mis canciones.
Yo aparte de todas estas cosas, también he tenido un diario de envidias, y uno de alegrías. El de alegrías me resultó muy útil, porque me di cuenta de cuantas cosas me dan alegría que antes de hacerlas me resisto a hacer jajaja.
¡Muchas gracias a ti, Dani! Quizá «mediocres» no era el adjetivo adecuado —o quizá sí—, sino «aburridos», «grises». Muchas veces leo sueños de otras personas y me fascinan por la complejidad, el simbolismo... También pienso que se los inventan, eso sí. ¡Y me ha encantado lo del diario de envidias!
Hola Elena! Si tuviera que escribir en un diario de gratitud, no me olvidaría de agradecer el hecho de haberme suscrito a tu correo
Es un placer leerte y tus reflexiones resuenan fuerte en mí. Me siento muy identificada. Que tengas un hermoso comienzo de año y desde Argentina, agradezco tus palabras y las espero con mucha ilusión! Gracias!
¡Muchas gracias a ti, Adriana! Ojalá el año esté empezando genial, y te traiga muchas alegrías.
Gracias Elena por este correo bellísimo para terminar el año. La idea del diario de gratitud me parece fantástica, aunque me temo que me pasaría lo mismo que a ti, y con el tiempo me quedaría sin tiempo para continuar agradeciendo. A mí me apasiona la idea del diario como aquello donde no está escrito lo que en realidad querías escribir, donde se puede leer lo que no has escrito. Un abrazo y feliz año, gracias por tus correos, que siempre me dan luz
¡Muchas gracias a ti, Begoña! Qué maravilla esa idea del diario posible dentro del diario que es... Justo ando releyendo el de Chacel y al principio, en los años cincuenta, plantea algo parecido (o no, pero a mí me lo ha recordado). ¡Un abrazo!